Hermanos y hermanas, el amor no conoce fronteras ni condiciones. Somos hijos amados, nombrados y elegidos personalmente. El Reino nos necesita a cada uno de nosotros y nosotras. Oremos.

Somos hijos e hijas amadas

• Que la Iglesia renueve su compromiso con la Palabra recibida de Jesús, siendo Buena Noticia siempre y para todos, en especial para los más frágiles y vulnerables de nuestro mundo.

Somos hijos e hijas amadas

• Que los seguidores de Jesús recontextualicemos el bautismo recibido en nuestra infancia y nos sintamos llamados a ser paso de Dios en la vida de las personas.

Somos hijos e hijas amadas

• Que los niños y jóvenes crezcan sintiéndose queridos, bien nombrados, respetados, valorados, reconocidos en sus familias y entornos, el amor como cimiento sólido en sus personas.

Somos hijos e hijas amadas

• Que cada niño, joven o mayor que sea bautizado este nuevo año haga la experiencia de encuentro personal con Jesús, se sientan necesarios en la construcción del Reino.

Somos hijos e hijas amadas

• Que nos sintamos llamados a ser hilos conductores del Amor de Dios, en especial en contextos de violencia, de falta de libertad, de injusticia, de exclusión.

Somos hijos e hijas amadas

Padre Madre buena, que nos sintamos urgidos a compartir lo que somos y tenemos con los desheredados de esta tierra, que seamos respetuosos con los diferentes, siempre dispuestos a acoger y a aprender.

Vicky Irigaray